El Heraldo.co.- Las noticias de estos últimos días tienen a la comunidad científica perpleja. El experimento ‘Opera’ ha abierto una puerta a un nuevo principio científico.
En el mayor laboratorio de investigación de partículas, Centro Europeo de investigación Nuclear CERN, los científicos buscan desentrañar los secretos que expliquen el origen del universo.
Buscando la velocidad de los neutrinos se encontraron con que estos viajaban más rápido que la luz, algo increíble de aceptar ya que plantea un contra sentido teniendo en cuenta la teoría de la relatividad de Einstein que, palabras más, palabras menos, sostiene que: “nada que tenga masa pueden viajar más rápido que la velocidad de la luz”.
En su afán y mediante mediciones que han venido realizando, han encontrado que al enviar desechos de neutrinos desde el acelerador de partículas, ubicado en Ginebra, hacia el receptor en Gran Sasso, en Italia, a 730 kilómetros de distancia y a 1400 metros bajo solidas rocas, evitan las interferencias de rayos cósmicos, que viajaron 60 nanosegundos más rápido que lo que lo hace la velocidad de la luz en ese mismo recorrido.
¿Qué son los neutrinos? Son partículas subatómicas sin carga eléctrica cuya masa es muy difícil de medir por ser muy pequeña. Son tan livianos que a duras penas pueden interactuar con la materia. Ellos nos atraviesan cada segundo y no nos damos cuenta, por eso su detección experimental es tan difícil.
Nacen del sol debido a la desintegración de otras partículas, de reacciones nucleares, de explosiones de bombas atómicas o de explosiones de supernovas. Otros provienen de la gran explosión del ‘big ben’ que dio origen al universo.
¿Cómo nos impacta este descubrimiento, es equivocada la teoría de la relatividad? Impacta fuertemente en el sentido de que si la teoría de la relatividad estuviese equivocada, la navegación aérea, marítima y espacial también. Todo fuera un caos y no tendríamos los adelantos y viajes espaciales con la precisión que se han logrado. Igualmente radares y GPS no tuvieran la efectividad que tienen.
Otros hablan de que el superar la velocidad de la luz, equivaldría a tener una “rotura en el tejido espacio temporal”, es decir, no existiría el principio de causalidad. Se podría viajar al pasado o ver un acontecimiento antes de que sucediese.
Indudablemente Einstein y su teoría seguirán siendo válidos, nos innegables sus aciertos, pero lo que no podemos desconocer es que el universo evoluciona, se mueve y es muy probable que encontremos otras regiones en donde se deben modificar las teorías anteriores.
Estamos en un momento importantísimo en la evolución y la teoría de la existencia de otras dimensiones también hace su aparición con fuerza. Nosotros solo conocemos 4, tres de espacio y una de tiempo.
Estas múltiples dimensiones que permanecen ocultas a escala microscópica, pero no para el mundo subatómico porque estas partículas (neutrinos) tienen la capacidad de traspasar con facilidad las cosas, de viajar por túneles dimensionales que reducirían en la práctica las distancias a recorrer. “Es decir, que en la realidad no tendrían que viajar a mayor velocidad que la luz para llegar más rápido a su destino”.
En fin, ahora todo se convulsiona y se cuestiona el límite de velocidad del universo. Se abren nuevas reflexiones y quién sabe si aún estaremos vivos para conocer científicamente la existencia de esas otras dimensiones en las que nos podemos mover cuando meditamos.
Bienvenido los neutrinos…
Por: Rebecca Cervantes
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